Hoy a las 3:13 pm
- " Los del espejo retrovisor, los que acostumbran a estar ahí abajo, están muy crecidos. Van líderes en la Liga y en su grupo de la Champions y esta es la razón y el motivo de que la ‘caverna mediática’ se haya olvidado por completo del ‘Villarato’ o del ‘Séptimo de Caballería’, en clara referencia a las presumibles ayudas arbitrales que recibía constantemente el Barça de Guardiola y haya dejado a un lado el ‘canguelo’ y el ‘cagómetro’, expresiones que utilizaban los de la Meseta para intentar sacar de quicio a los campeones azulgrana. Ni tan siquiera en ‘Punto Pelota’, el programa dirigido y presentado por Josep Pedrerol, pierden ya el tiempo en estos menesteres.
-Ahora matan su tiempo para hablar de modas que ya están en desuso (Iker Casillas: “El Barça es una moda y las modas pasan”), ensalzan a Mourinho a los altares (no se cansan de repetir que se ha dado con el entrenador idóneo) y hablan de conseguir la décima, a modo y manera de la conjura utilizada en la Séptima o la de "Juntos Podemos" que valió para ganar la Liga en 2007. Las conjuras blancas están a la orden de cada día y eso suscita que anden como locos porque se ve que ‘Mou’ motiva a sus jugadores con una piña antes de los partidos, como si se tratara de un invento suyo, cuando el Barça lo viene haciendo desde tiempos inmemorables...
- La prueba del algodón es la que vale. En el actual equipo blanco, ni aunque lo laves una y cien veces con Perlán, saldrá a relucir restos de suciedad. Su juego deja mucho que desear por más que se vea signos de mejora, que los hay, pero que aún está a años luz del Barça de Guardiola. La realidad está ahí, pese a quien pese. Por esta circunstancia, un servidor sigue viendo al Madrid desde mi espejo retrovisor.
- Y para acabar de poner las cosas en su sitio, añadir que me adhiero a las palabras que Xavi dijo en COPE: “ Para el Barça, Mourinho es un estímulo, como todo lo que se ha gastado el Real Madrid para destronarnos. ¿Es lo que quieren? ¡Pues a por ellos!”. Al Real Madrid y al madridismo habría que recordarles que no es como se empieza, sino como se acaba...Fuente: Sport ( José Luis Carazo )
-Ahora matan su tiempo para hablar de modas que ya están en desuso (Iker Casillas: “El Barça es una moda y las modas pasan”), ensalzan a Mourinho a los altares (no se cansan de repetir que se ha dado con el entrenador idóneo) y hablan de conseguir la décima, a modo y manera de la conjura utilizada en la Séptima o la de "Juntos Podemos" que valió para ganar la Liga en 2007. Las conjuras blancas están a la orden de cada día y eso suscita que anden como locos porque se ve que ‘Mou’ motiva a sus jugadores con una piña antes de los partidos, como si se tratara de un invento suyo, cuando el Barça lo viene haciendo desde tiempos inmemorables...
- La prueba del algodón es la que vale. En el actual equipo blanco, ni aunque lo laves una y cien veces con Perlán, saldrá a relucir restos de suciedad. Su juego deja mucho que desear por más que se vea signos de mejora, que los hay, pero que aún está a años luz del Barça de Guardiola. La realidad está ahí, pese a quien pese. Por esta circunstancia, un servidor sigue viendo al Madrid desde mi espejo retrovisor.
- Y para acabar de poner las cosas en su sitio, añadir que me adhiero a las palabras que Xavi dijo en COPE: “ Para el Barça, Mourinho es un estímulo, como todo lo que se ha gastado el Real Madrid para destronarnos. ¿Es lo que quieren? ¡Pues a por ellos!”. Al Real Madrid y al madridismo habría que recordarles que no es como se empieza, sino como se acaba...Fuente: Sport ( José Luis Carazo )
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Me gusta Carazo, no lo puedo negar. Me gustan quienes se autoaniman y siempre ven lo positivo de su equipo. Además es hasta simpático. Aficionados rivales así forofillos con ése talante le dan salsa al fútbol. Y no lo digo de broma.
Del artículo no opino, porque se nota quien lo escribe y desde donde.
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24-10-2010 a las 5:39 pm
Perdona que discrepe, hermano. Bueno, si no me perdonas, que te den. Es broma. Yo no veo que hable bien de alguien en ningún párrafo del artículo, más bien lo que hace es hablar mal del prójimo, que debe ser algo que te deben recomendar los curas durante una de esas omilias pronunciadas en las iglesias de la religión barcelonista. El bien y el mal y la denuncia de los pecados del Madrid. Si solo te parece mal lo que hacen los que no acuden a tu iglesia dificil reconducir en sus malas aptitudes a tus feligreses. Pero ese no es mi problema. Dice que el juego del Madrid ha mejorado un poco. Que cachondo. Pues como lo haga de veras va a empezar a doblar perseguidores, como en las carreras de coches.
Yo al señor Carazo le recomendaría que abatiese el retrovisor, que lo tiene plegado hacia el coche y no le enseña lo que tiene detrás. Cualquier día de estos le adelanta por la izquierda también el Valencia y se pega un pifostio de cuidado. Señor Carazo, antes de comenzar a rodar el coche hay que llevar el cinturón de seguridad puesto y los retrovisores perfectamente calibrados. El Madrid está ahora mismo delante, y no solo en la clasificación, también en el apartado de la calidad de juego y en el de las sensaciones. Cotorrear del vecino de puente aéreo no va a materializar lo que está delante detrás ni le va a permitir rascarse la sarna que se le nota. Tampoco a quien cuelga el artículo. Ni a todos esos analistas del foro que presumen de imparciales, pero que son incapaces de decir media frase del Madrid con ecuanimidad. Incluso los hay que tan siquiera son capaces de decirla sea buena o sea mala por que no soportan tener en la boca al Madrid. Mal les va a ir en su futuro oficio, por que tendrán que hablar de unos y de otros, me supongo. Hasta de la Ponferradina, que también tiene su público. Aunque todo esto el fútbol cada vez es más raro y el ningunear a los otros comienza a ser un ejercicio de coherencia para muchos.
Este artículo del señor Carazo sería una saludable exhibición de buen humor y chispeante ingenio, es un decir, si no manipulase más que un alfarero fabricando una tinaja. Las palabras que pronunció el jugador del Madrid Casillas estaban llenas de algo de lo que él no es capaz, de respeto y admiración por el adversario. Se ha quedado con la anécdota de la frase final de la intervención de un chico que dejó más o menos sus estudios aparcados y que expresarse no es uno de sus fuertes. Allá el señor carazo con sus chascarrillos. Entiendo que tendrá su parroquia, así que seguramente le irá bien apurando hasta el final el vaso de su locuacidad.
El caso es que ayer el Madrid marcó seis goles seis, y pena que no fuera a una hora más taurina. Y lo verdaderamente sorprendente es que solo apretó al rival hasta la consecución del segundo gol. A partir de ahí se dejó llevar por la inercia del buen juego, por la bendita locura del juego total que despliega en los últimos encuentros, en los que un lateral puede ser extremo, lease Marcelo, o un extremo lateral, lease Di Maria, en el que el delantero centro es el que centra y el pasador el que remata, verbigracia el primer tanto. Los Villaratos no existen, pero haberlos hailos. Si el tema le escuece que use las palabras de Xavi para el conjuro mientras prepara la queimada. Pero las frases del jugador de la Selección Nacional las veo más del estilo de Brave Heart que de un señor Carazo de la vida. Me extraña que las haga suyas como lema. Lo mismo nos acaba enseñando las posaderas también. Que veo que algunos debajo de sus palabras no esconden argumentos. Las verguenzas al aire y para disimular nos hacemos unas risas.
Yo al señor Carazo le recomendaría que abatiese el retrovisor, que lo tiene plegado hacia el coche y no le enseña lo que tiene detrás. Cualquier día de estos le adelanta por la izquierda también el Valencia y se pega un pifostio de cuidado. Señor Carazo, antes de comenzar a rodar el coche hay que llevar el cinturón de seguridad puesto y los retrovisores perfectamente calibrados. El Madrid está ahora mismo delante, y no solo en la clasificación, también en el apartado de la calidad de juego y en el de las sensaciones. Cotorrear del vecino de puente aéreo no va a materializar lo que está delante detrás ni le va a permitir rascarse la sarna que se le nota. Tampoco a quien cuelga el artículo. Ni a todos esos analistas del foro que presumen de imparciales, pero que son incapaces de decir media frase del Madrid con ecuanimidad. Incluso los hay que tan siquiera son capaces de decirla sea buena o sea mala por que no soportan tener en la boca al Madrid. Mal les va a ir en su futuro oficio, por que tendrán que hablar de unos y de otros, me supongo. Hasta de la Ponferradina, que también tiene su público. Aunque todo esto el fútbol cada vez es más raro y el ningunear a los otros comienza a ser un ejercicio de coherencia para muchos.
Este artículo del señor Carazo sería una saludable exhibición de buen humor y chispeante ingenio, es un decir, si no manipulase más que un alfarero fabricando una tinaja. Las palabras que pronunció el jugador del Madrid Casillas estaban llenas de algo de lo que él no es capaz, de respeto y admiración por el adversario. Se ha quedado con la anécdota de la frase final de la intervención de un chico que dejó más o menos sus estudios aparcados y que expresarse no es uno de sus fuertes. Allá el señor carazo con sus chascarrillos. Entiendo que tendrá su parroquia, así que seguramente le irá bien apurando hasta el final el vaso de su locuacidad.
El caso es que ayer el Madrid marcó seis goles seis, y pena que no fuera a una hora más taurina. Y lo verdaderamente sorprendente es que solo apretó al rival hasta la consecución del segundo gol. A partir de ahí se dejó llevar por la inercia del buen juego, por la bendita locura del juego total que despliega en los últimos encuentros, en los que un lateral puede ser extremo, lease Marcelo, o un extremo lateral, lease Di Maria, en el que el delantero centro es el que centra y el pasador el que remata, verbigracia el primer tanto. Los Villaratos no existen, pero haberlos hailos. Si el tema le escuece que use las palabras de Xavi para el conjuro mientras prepara la queimada. Pero las frases del jugador de la Selección Nacional las veo más del estilo de Brave Heart que de un señor Carazo de la vida. Me extraña que las haga suyas como lema. Lo mismo nos acaba enseñando las posaderas también. Que veo que algunos debajo de sus palabras no esconden argumentos. Las verguenzas al aire y para disimular nos hacemos unas risas.
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