El Fútbol y sus aledaños (34) - ¿Al fín el recreo? - R. Madrid 5 - Athletic Club 1

 

Portada de AS del 17 de Noviembre de 2012

Portada de AS del 16 de Noviembre de 2012 

¿Al fin el recreo?
(R. Madrid 5 - Athletic Club 1 - Liga BBVA - 17-11-2012)

Probablemente fuera el de ayer el partido más plácido del Real Madrid en lo que va de temporada, el que ha jugado con menos sobresaltos, pudiendo al fin disfrutar de sí mismo. Cierto que Casillas acabó enfadado, encolerizado incluso tras encajar el gol, pero ya sabemos que este jugador es todo generosidad en la entrega al equipo, perfeccionista, autocrítico, autoexigente... ¿Cómo dicen?¿Qué el enfado no fue consigo mismo sino con sus compañeros de la defensa? Van a ser ustedes de esa yihad de Twitter de la que tanto habla últimamente la prensa. No sobrepasen la raya del terreno de juego que me la cargo, que en mi anterior artículo ya me llamó la atención por su culpa un anónimo lector, celoso del cumplimiento de los valores, vaya usted a saber si de los que se le suponían al Real Madrid o los que ahora tanto se pregonan del Barça.

Va a ser cierto que los equipos juegan según la personalidad de su entrenador. El Bielsa de las ruedas de prensa, con su hablar quedo no apto para duros de oído le cuadra al Athletic que vimos ayer, correcto en el trato de balón, combinativo, pero que no discute, que lo mismo se deja ganar con educación, sin una sola protesta, una final de Europa League que meter una manita en el Bernabeu. El Madrid de Mourinho, en cambio, es un equipo contestón, faltón por momentos, que lo mismo le remonta al Manchester City en un cuarto de hora en un partido capaz de resucitar a los muertos, me refiero al camposanto que son las gradas del Santiago Bernabeu, que devuelve cada uno de los golpes recibidos en el Ciudad de Valencia con goles. Esquizofrenia es lo que hay en el club del distrito de Chamartín, nervio y coraje en el césped, plácida siesta en las tribunas, y esperemos que quien contagie al otro grupo sea el que queremos todos y no la prensa.

Como siempre, como es de rigor cuando se trata del Real Madrid, los prolegómenos del partido, su prólogo, venía cargado de polémica. Y no traída por los periódicos de la Ciudad Condal, sino propuesta por nuestros propios diarios, por la prensa de nuestra ciudad. ¿Con amigos como estos quien quiere enemigos?, es lo que nos preguntamos. La realidad nos dice que tenemos amigos, enemigos y agresores. Porque como agresión, sobre todo a la inteligencia de sus lectores, es como deben entenderse las informaciones vertidas por al diario As en los últimos días. Se nos dijo es viernes que Cristiano estaba más cerca de marcharse del Real Madrid, de renunciar a la renovación, que de su continuidad en la Casa Blanca. Esta afirmación venía refrendada por el "porque lo decimos nosotros, y lo que decimos va a misa", tan habitual en la prensa deportiva. Y una vez hecha la afirmación esta sirvió de cimiento para posteriores aseveraciones y análisis. Cristiano se sentiría respaldado, según ellos, por la afición pero no por el club. Por lo tanto había que minar este respaldo para debilitar la posición del jugador portugués en ese juego de muñecas rusas al que se dedica la prensa: abrir en canal a CR7 para así acceder a Mou, que es la antesala de Florentino. Y para lograrlo se inventaron una burda patraña que no habría creído ni un niño de dos años. Cierto, la ha creído buena parte de la parroquia blanca. Esa parte que a veces parece menor de edad, un muñeco nenuco de aquellos que se les podía dar el biberón, el que cada mañana encuentran en las páginas de los diarios de la capital de España. La prueba de la desafección de Ronaldo con la causa madridista había sido un esparadrapo en el escudo que adorna su chandal, que habría tapado con el trozo pegajoso en el que estaba escrito su número de dorsal. Todo un alegato en contra de la junta directiva y el presidente, ante quienes tramite su renovación, según, claro, el MI6 periodístico. Lástima que la culpa la tuvieran en realidad los utilleros y se nos estropearan la teoría de la conspiración. Pero, mira, del mal el menos, al menos la prensa tiene un cabeza de turco a quien echarle la culpa de su incompetencia y malicia. Algún reportero con vergüenza, que alguno queda todavía, tengamos fe, decía ayer que todo redactor de deportes sabe que los utilleros de los equipos distinguen la ropa de cada futbolista a la hora de repartrilas con estas triquiñuelas, añadiéndole una marca, en el caso de los utilleros del Real Madrid una tira de esparadrapo. En otras palabras, que no hubo ninguna confusión en el equipo de AS, que mintieron a sabiendas. Que mantuvieron el engaño hasta bien entrada la tarde de ayer sábado para decantar ese plebiscito popular en el Bernabeu acerca de Ronaldo hacia el rechazo. Y la jugada les ha salido redonda a corto plazo. Ayer solo hubo silencios para premiar los logros recientes de CR7, sus heridas de guerra, las metas alcanzadas gracias a él en estos 4 años. Pero mucho me temo que a la larga les va a salir caro. Esa maldita Yihad que no hace más que entrometerse y destapar cada una de las cajas de gusanos que deja la prensa en nuestro camino. Veremos que pasa pero, por de pronto, AS y Marca han perdido una cuarta parte de sus lectores según los datos de septiembre. Y estamos en noviembre. Iba a ser la fiesta de Ronaldo, suponiendo que la afición del Bernabeu sea aun capaz de agasajar a uno de los suyos, que quizá sea mucho suponer, pero la maledicencia lo impidió. En el tiempo que hice el servicio militar había un dicho muy popular entre los integrantes de las compañías de seguridad, como la mía en la Infantería de Marina, y que viene mucho al caso: "Alerta, centinela, que el enemigo está dentro y no fuera". Esta broma advertía al incauto "peluso" recién venido de la instrucción, que durante el tiempo que permaneciese en el punto de guardia, más a los etarras que tenía fotografiados en el póster de los más buscados que colgaba en la pared de su garita, a quien debía temer era a los posibles mandos que pudieran dejarse caer por donde estaba para joderle la marrana. Esas son las novedades que tenemos que conseguir transmitir a la parte de la afición que aun está dormida y que es tan vulnerable a las mentiras en el próximo cambio de guardia. La prensa es una fuente emponzoñada, jamás habremos de beber de ella para informarnos. Que alguien escriba un manual del perfecto yihadista, uno como esos que tienen los perroflauta cuando van de "manifa", y que incluya en el decálogo esta verdad tan contrastada.

Pero vayamos al partido, que me quedo sin hueco para comentarlo. Al menos unas líneas. Por primera vez en lo que va de temporada se hace difícil elegir a los más destacados, porque fueron muchos. El mejor sin duda Benzemá, que cuajó su mejor actuación, no solo en el presenteejercicio sino desde que viste la zamarra blanca. Marcó dos goles, que pudieron ser más, y participó en casi todas las jugadas de ataque, tanto en su construcción como en su alicatado y acabado. Este Benzemá admite pocas discusiones como titular del 9. No seré yo quien quiera prescindir de Higuain, que me parece otro jugador superlativo, por más que haya quien le discuta el pan y la sal. Para gustos los colores. Pero creo que Benzemá ha de ser titular en circunstancias normales, no mediando rotaciones o lesiones, únicamente porque, como dice la máxima, "Lo bueno es enemigo de lo mejor". El primer gol del francés fue una obra de arte. Pase de 50 metros de Modric, respondiendo a un desmarque en ruptura del delantero, por el carril central, que es controlado en pleno galope y rematado sin dejar que toque el césped. Hay quien concede la autoría a Aurteneche, pero quien primero toca el balón es Benzemá, y creo que la trayectoria es apenas alterada por el central. La pelota trazo una nueva parábola, como una maqueta a escala del pase del croata, y entró con suavidad en la portería del Athletic. Benzemá es capaz de desplegar e imprimir una gran potencia en lo que hace, pero prefiere la sutileza, y está plenamente capacitado para ella. Su segundo gol, el tercero de la cuenta del Madrid, es una mezcla de ambas: gran obra pública y marquetería al mismo tiempo. CR7 le cede el balón en el pico del área, el de la derecha, estando de espaldas a la portería, quizá buscando un apoyo, una pared con la que internarse hasta la cocina rival, pero el francés decide desentenderse de todos, ejecutar una media vuelta, casi de ballet, y chutar a meta. El tiro, curvo y afilado como una cimitarra, hiere las mallas y da la tranquilidad total al equipo. Nuestro Cristiano está rodeado de elches, jenízaros y abencerrajes... Para nuestra suerte.

Vimos ayer al mejor Modric de la temporada también. Por fin quedó meridianamente claro que estamos ante un jugador de extraordinaria calidad. Un jugón en el argot del añorado Montes. Su asistencia en el primer gol, casi del tipo que Romay hacia al palomero Iturriaga, nos indica que al menos en esta suerte es capaz de suplir a Alonso. Pero con que sea él al 100% y no un porcentaje cualquiera de Xabi me doy por satisfecho. También brillaron CR7, en una labor más oscura para los piperos de lo habitual porque no marcó goles esta vez, y pido perdón por usar este término peyorativo que tan poco me gusta, Özil por momentos, Reyes, que decididamente es otra cosa cuando juega en el centro, más y mejor, y Callejón, jugador bullicioso, ambicioso como debe ser un delantero y que aporta otras cosas, como ya he indicado alguna vez. lo que no es fácil dada la calidad y diversidad que atesora este Real Madrid. El resto simplemente bien. Habrían brillado más si se hubieran visto más exigidos por el contrario, menos arropados por el acierto colectivo. Pepe estuvo imperial, como siempre, en los minutos de encuentro en los que aun había dudas razonables acerca del resultado, y Xabi se fajó en defensa para permitir que otros tuvieran su momento de gloria. Amor pleno es lo que siento por este jugador, que no desdeña ningún apartado del juego, que nunca impone su protagonismo, que no se le caen los anillos por hacerle una o 100 coberturas a Marcelo durante un encuentro, o por cortar un contraataque rival sabiendo que le acarreará la tarjeta amarilla. Tenemos como fogonero a un crack y por eso cuando este Real Madrid alcanza su velocidad de crucero desplaza mayor tonelaje a más nudos que nadie.

Gran partido, plácido, sin épica quizá, y eso deja con hambre al buen madridista, al de antes. Magnífico encuentro de un Madrid que apenas tuvo que fajarse, que hasta nos regaló detalles de Arbeloa. Un jugadón en el que fue superando a rivales por tesón y calidad y en el que sirvió en bandeja su gol a Khedira, recién incorporado a la disciplina del grupo. Muchos madridistas de la yihad lo festejamos en Twitter por saber el daño que ha causado a la prensa, que le sonríe mostrandole los dientes cuando lo entrevista y lo apuñala por la espalda durante las retransmisiones. Es la guerra y la vamos a ganar nosotros. Y ellos lo saben. No habrá prisioneros después de como se han portado durante tantos años, en especial los últimos. No somos un rebaño de tontas ovejas. Que les quede claro. Ayer iba a ser el día de Ronaldo y fue el de todos menos el suyo. Incluso de quienes envenenan el madridismo con sus mentiras interesadas. Cuidado que desde ahora habrá siempre un yihadista en el punto de guardia, sabiendo a donde ha de mirar.